Publicado: 13.2.2016
Varias personas esperan ser evacuadas en la cornisa del edificio incendiado en Odessa
Ucrania, el país que alcanzaría crecimiento y prosperidad una vez que le diera la espalda a Rusia y firmara un acuerdo para ligarse a la UE, como se afirmó antes del golpe del 22 de febrero del 2014, simplemente se hunde aún más en la ciénaga.
El ministro de finanzas que Estados Unidos elegido a dedo para tratar de salvar la corrompida economía del país, el lituano Aivarus Abromavicius, tiró la toalla y renunció. Frente a la prensa internacional justifica su renuncia por la corrupción sistémica ucraniana, según informa la BBC:
Ha quedado claro que cualquier tipo de reforma sistémica está bloqueada de manera decisiva. Es más que la falta de apoyo o voluntad política, declaró Abromavicius a un periodista del periódico El Pais. «Me niego a ser parte de este sistema» dijo.
Ha quedado claro que cualquier tipo de reforma sistémica está bloqueada de manera decisiva. Es más que la falta de apoyo o voluntad política, declaró Abromavicius a un periodista del periódico El Pais. «Me niego a ser parte de este sistema» dijo.
Ésto dio lugar a algo tan inusual como que diez embajadores, entre ellos los de los EE.UU., Alemania y Gran Bretaña, enviaron una carta al gobierno de Ucrania donde expresaron su descontento. Bueno, el señor Abromavicius fué puesto a gobernar a nombre de Occidente y el FMI, y hasta se le concedió la ciudadanía ucraniana a toda prisa; pero de qué sirvió…
En nombre del Fondo Monetario Internacional (FMI), su directora Christine Lagarde amenazó a Kiev que «si Ucrania no pone orden en la lucha contra la corrupción, va a ser difícil que los programas apoyados por el FMI continúen o tengan éxito.»
Disculpen, es esto algo que el FMI y sus colegas occidentales han descubierto ahora? Que no leen steigan.no, o al menos los medios informativos de Ucrania? El país está totalmente corrompido y los sinvergüenzas más grandes controlan el gobierno.
Recordemos lo escrito el 15 de agosto de 2015:
El FMI ha puesto en los últimos meses miles de millones de dólares en el sistema financiero de Ucrania para estabilizar los bancos del país. Aproximadamente 1,8 mil millones de US$ fueron transferidos a la entidad de crédito más grande del país, a saber el Privatbank. Este banco es controlado por el oligarca Igor Kolomoiski. Pero en lugar de invertir este dinero en Ucrania, Kolomoiski los transfirió al exterior a través de una red de compañías petroleras.
Es la agencia EFE que escribe esto:
El FMI decidió en abril de 2014 proporcionar un credito de emergencia a Ucrania por US$ 17 mil millones. La directora jefe del FMI, Christine Lagarde, elogió la «determinación sin precedentes» del gobierno de Ucrania y su «programa de conomía temeraria» (léase la austeridad brutal contra el pueblo de Ucrania). Hasta ahora el FMI ha transferido alrededor de 4,5 mil millones de dólares a Ucrania, de los cuales 3 mil millones para el Banco Central de Ucrania. Con este dinero se pensaba estabilizar los bancos en el país. Pero pasó que esos 1.8 mil millones desaparecieron por canales oscuros.
En diciembre el FMI aprobó romper sus propias reglas para la concesión de préstamos a Ucrania. Luego los créditos se extendieron a pesar del hecho de que Ucrania no fue capaz de pagar.
Pero ahora parece que también los genios del Departamento de Estado de EE.UU., que se empecinaron en nombrar esta banda corrupta en las oficinas del gobierno ucraniano se han cansado de su amado Arsenije «Yats» Jatsenjuk. En la revista Foreign Policy, ligada al Departamento de Estado, dice ahora que «Jatsenjuk tiene que irse.»
De acuerdo con la BBC se hundió el PIB de Ucrania en un 7% en 2014 y 12% en 2015. La moneda ‘hryvnia’ ha perdido el 70% de su valor desde que las protestas de ‘Maidan’ y el país se considera como la quinta economía más mala del mundo.
Las únicas personas que parecen estar satisfechos con estos líderes ineptos y corruptos en Kiev son los ministros noruegos Börge Brende y Erna Solberg. Porque han entregado a la Junta de Kiev 200 millones de coronas noruegas fiscales, no como préstamo, sino como un regalo! Osea ha tirado ese dinero a un barranco sin fondo llamado ‘economía de Ucrania’. Y a los medios de comunicación noruegos les parece obviamente que esto está muy bien, ya que no han dicho ni una palabra crítica sobre esto.